El
proceso de adquisición del sistema de escritura.
El
proceso de alfabetización comprende dos etapas, una corresponde al momento
inicial o de adquisición del sistema de escritura, y la otra a la consolidación
y desarrollo de este conocimiento, aunado al aprendizaje de las características
del lenguaje escrito.
Durante
la etapa de adquisición del sistema de escritura se sientan las bases para que
los niños puedan reconocer, fundamentalmente, la función social de la escritura
y su principio alfabético, como características esenciales. La ortografía y la
puntuación están constituidas por otros elementos y responden a reglas que n
son menos importantes, pero cuyo descubrimiento es posible para algunos niños
en esa misma etapa y, para otros, hasta después de haber adquirido el
conocimiento de las bases señaladas.
El
trabajo escolar de la escritura se desarrolla a partir de los usos sociales de
ésta, es decir, mediante la lectura y la escritura de textos significativos
para los niños, que sean de su interés, estén al alcance de sus posibilidades
intelectuales y correspondan a los diversos tipos de texto utilizados en su
entorno.
La
importancia de que los niños inicien el aprendizaje de la escritura de manera
significativa, utilizándola para servirse realmente de ella, radica en que este
aprendizaje generará la necesidad y el deseo de progresar en su conocimiento y,
consecuentemente redundará en los beneficios que el gusto y el hábito de la
lectura proporcionan.
Es más
probable que un niño mantenga su interés por la escritura y la lectura si
escribe para alguien, si tiene uno o varios lectores y si él mismo encuentra
significados en lo que lee. Esto no sucede cuando escribe o lee textos sin que
éstos cumplan una función vinculada con él, con su realidad y en su relación
con los demás.
Escribir
de sí mismo o de otros temas , de la misma manera que hablar, tiene sentido
para el niño si lo hace para y con otros. Ésta es la condición mínima pque debe
cumplirse en la tarea alfabetizadora para que el proceso de adquisición se
efectúe y continúe su desarrollo de manera productiva.
En la
etapa de consolidación y desarrollo, que se prolonga durante toda la vida de un
individuo, pero que particularmente se promueve en la escuela, se propician
situaciones para que las escrituras realizadas por los alumnos adquieran
características cada vez más apropiadas a los requerimientos de la comunicación
que se pretende lograr con este medio de comunicación.
Así,
además de conocer y aplicar los recursos que el sistema provee, empleará su
conocimiento del lenguaje para cumplir sus intenciones comunicativas.
Palacio,
M. (1995). Español, sugerencias para su enseñanza, primer grado. México: SEP.
No hay comentarios:
Publicar un comentario